HISTORIA DE LOS HACKER


Se dice que el término de hacker surgió de los programadores del Instituto Tecnológico de Massachussets (MIT), que en los 60, por usar hacks, se llamaron a sí mismos hackers, para indicar que podían hacer programas mejores y aún más eficaces, o que hacían cosas que nadie había podido hacer.
También se dice que la palabra deriva de "hack" (es decir, "dar un hachazo" en inglés) término que se utilizaba para describir la forma en que los técnicos telefónicos arreglaban cajas defectuosas, un golpe seco. Y la persona que hacía eso era llamada hacker.
Los hackers no son piratas informáticos. Estos últimos son aquellos quienes adoptan por negocio la reproducción, apropiación o acaparación y distribución, con fines lucrativos, y a gran escala, del software desarrollado por otros, sin aportar a este una mejora, ni un beneficio a la comunidad. Quienes, por otro lado, se dedican a alterar la información y realizar ataques a otros sistemas con una finalidad dañina o destructiva, reciben el nombre de crackers.
Esta definición del término, resulta, sin embargo, un tanto amplia, al no corresponderse con la concepción más extendida, difundida en parte por la prensa, la literatura y el sensacionalismo mediático, y adoptada como mito urbano.
También se asocia el término hacker a aquellas personas que poseen elevados conocimientos de sistemas y seguridad informática, los cuales pueden emplear en beneficio propio y de la comunidad con que comparten intereses. En tales casos suele distinguirse entre aquellos cuyas acciones son de carácter constructivo, informativo o sólo intrusivo, o que además lo son de tipo destructivo, catalogados respectivamente de hackers y crackers, o en círculos anglosajones, a veces, por las expresiones inglesas "white hat" y "black hat". Recientemente ha aparecido el término, más neutro, "grey hat" ("sombrero gris") para referirse a aquellos hackers que ocasionalmente traspasan los límites entre ambas categorías, o los que realizan acciones que sin ser éticamente reprobables son tachadas por la legalidad vigente o ideología dominante como acciones delictivas, ilícitas o ilegales, o incluso a la inversa